Las sesiones con bebés y niños siempre son imprevisibles, dependen de muchos factores : de la hora, del ambiente, del día que tengan los niños, de la paciencia de los padres... y del fotógrafo
¿ Y qué hay del fotógrafo?
El fotógrafo, al ser el profesional contratado, no está sujeto a muchas variables, puede estar más o menos cansado o tener mejor o peor día, lo que hará que su trabajo le cueste mayor o menor esfuerzo, pero si es un profesional, la calidad de las fotos no se verá alterada y normalmente, yo por lo menos así lo hago, pondrá sus conocimientos técnicos y su creatividad al 100%
Lo único que todavía no he aprendido a tener controlado son las expectativas. Suelo tener expectativas entre los 15 min antes de la sesión y hasta pasados unos 10 min de su inicio. Después llegan los imprevistos, la sesión no es lo que habías imaginado y se acaban las expectativas.
Pero llega algo mejor y más interesante : La Realidad y lo que puedes hacer con ella .
Al final las fotos que sacas son imágenes nuevas que no tenías previstas, pero que se convierten en imágenes perfectas para ese momento
Esta mañana empecé el día con muchas expectativas:
Cogí todos mis bártulos para fotografiar recién nacidos : además de cámara, focos y trípode; telas, mantitas de colores, pañuelos para envolverlos y demás atrezzo y me desplacé a realizar una sesión de fotos a un pequeñajo de 11 días. Mmmmm...tantas expectativas.
Todas las sesiones son especiales, porque cada familia y cada niño son únicos.
En las sesiones se crean momentos mágicos : en un juego, en un instante de silencio, a través de una mirada ...
Pero esta sesión en particular para mí era muuuuuuuuuuuyyyyyyyyyy especial, porque el bebé es hijo de Olga, una amiga muy querida para mí, amiga con la que hemos compartido muchísimas cosas: desde el instituto, las juergas, la literatura, los amores, los hijos, los exámenes para entrar en la universidad ( ya con niños las dos ) hasta, una temporada, la vivienda.
Para mí siempre es importante sacar a todos los niños que entran por la puerta del estudio con su luz especial, con su propia belleza, con su rasgo único.
Pero hoy las expectativas se me habían disparado porque además de profesional el asunto era personal y mi amiga es GRANDE, muy grande, como lo son las amigas que siempre están ahí, incondicionalmente.
Hasta aquí las expectativas: Fotos magníficas para una magnífica amiga
A partir de aquí la realidad:
La Realidad fué que Lluc había empezado con cólicos por la noche y que le continuaron durante el día de hoy.
La Realidad es que apenas se calmó veinte minutos como para estar relajado.
Lo que hicimos con la realidad fué adaptarnos, charlar, intentar, ver que no, comer, intentar de nuevo y conseguir disparar tres fotos
El jueves vendrán al estudio.
La Realidad es que con los bebés hay que tener tiempo y si no se tiene hay que crearlo.
Bebé = Oportunidad de conectar con otro rítmo
La Realidad es que en ocasiones las sesiones con los Bebés se tienen que hacer dos veces
La Realidad es que sólo en tres fotos Lluc ya ha dejado claro que es precioso
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